12 de diciembre de 2024
"Y él estará, y apacentará con poder de Jehová, con grandeza del nombre de Jehová su Dios; y morarán seguros, porque ahora será engrandecido hasta los fines de la tierra.”
En los primeros días del reinado de David como rey de Israel, Dios le prometió a David que su descendiente sería el rey del pueblo de Dios en un reino que duraría para siempre. Por boca de varios profetas Dios confirmó esa promesa. Dios reveló al profeta Miqueas algunos detalles en el cumplimiento de esa promesa. El futuro rey vendría de Belén pero pre-existiría Su aparición en Belén. Esta profecía aparentemente contradictoria se cumplió perfectamente en la persona de Jesús, que era plenamente humano y plenamente divino, y vino a la tierra para nacer de la virgen María en Belén. Como rey, Jesús proveerá para su pueblo y reinará para siempre. Pero podemos ver claramente que esta segunda parte de la profecía aún no ha sucedido. Jesús actualmente no reina como rey de Israel en la tierra y el pueblo de Israel no vive actualmente seguro en paz. Entonces, esto debe significar que el Rey Jesús vendrá a la tierra por segunda vez para establecer Su reino eterno donde Su pueblo morará seguro. Dios es fiel a todas sus promesas. Si Dios puede hacer que la primera parte de esta profecía suceda, ciertamente hará que la segunda parte de la profecía también suceda. Jesús ciertamente regresará con poder y reinará para siempre como el Rey Jesús, el pastor amoroso que trae la paz definitiva a su rebaño.
Oración: “Padre, te damos gracias por tu gracia y misericordia hacia nosotros. Jesús, sabemos que vienes otra vez para establecer tu reino. Ayúdanos a preparar a otros mientras esperamos tu regreso.”