5 de diciembre de 2024
Y vi el cielo abierto, y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llama Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y hace la guerra … Y en Su manto y en Su muslo tiene escrito un nombre: “REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES.”
“… el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas.”
Este pasaje nos trae tanta esperanza al leer acerca de la supremacía del Hijo de Dios. En el Antiguo Testamento, Dios usó profetas o individuos específicos para hablarle a su pueblo. El versículo 2 nos muestra que Dios usó a Jesús para hablarnos, y los creyentes ahora tenemos el Espíritu Santo y la Palabra escrita de Dios para tener comunión con Dios. A través del sacrificio de Jesús por nuestros pecados en la cruz, Él completó la misión de Dios para la salvación de reconciliarnos con Dios. Génesis 2 muestra brevemente cómo Dios diseñó nuestras vidas: una comunión completa con Dios. Hebreos nos recuerda que Jesús está sentado en el trono con Dios y es superior a cualquier problema o situación que enfrentemos hoy. Dios desea que tengamos una relación profunda con Él para que podamos encontrar consuelo y esperanza sólo en Su nombre. Jesús algún día regresará, toda rodilla se doblará y toda lengua confesará que sólo Él es Dios. Como creyentes, podemos descansar en la esperanza que Jesús provee de que nuestras almas estén seguras en Sus manos.
Oración: “Padre, gracias por la esperanza que podemos encontrar en Ti, ya que solo tú brindas una paz más allá de todo entendimiento. Te alabamos por tu plan de salvación, ya que deseas que cada ser humano te conozca íntimamente. Ayúdanos a vivir nuestra vida diariamente con la esperanza que Jesús trae y a recurrir a ti en cada circunstancia. Amén.”